frases NOVENO ELMA: marzo 2010 frases

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lunes, 22 de marzo de 2010

TARJETITAS DE BENDICIONES

Hola chicas, lo prometido es deuda, aquí les dejo unos regalitos para que puedan descargarlas en sus compus o enviarlas a sus amigos.


























Espero que les gusten.
Las quiero mucho!...

LEY CONTRA LA VIOLENCIA DOMÉSTICA

En el siguiente enlace encontrarán la Ley Contra la Violencia Doméstica, solo denle click y podrán ver cada uno de los artículos o si quieren pueden copiarla y pegarla en WORD para que incluso, de ser necesario la impriman.
Consúltenla de caso de tener alguna duda y si tienen la posibilidad de conversar con un abogado consulténle sus dudas y luego comentamos en clase.
Es muy importante estar bien informadas.

http://www.scielo.sa.cr/scielo.php?pid=S1409-00152001000300007&script=sci_arttext

TEMA DE LA SEMANA: VIOLENCIA DOMÉSTICA

Violencia doméstica


Definición:



Dentro de la definición de Violencia Doméstica se debe tomar en cuenta la agresión física, agresión verbal, maltrato psicológico, contacto sexual no deseado, destrucción de la propiedad, control del dinero , amenazas de aislamiento social. Frecuentemente las personas agredidas en la violencia doméstica provienen de todas las culturas y de cualquier religión. No hay división en clases sociales toda la sociedad se está viendo afectada por este problema.



En las personas que sufren violencia doméstica tienen sentimientos de impotencia, se sienten aisladas, culpables, experimentan mucho temor y vergüenza. Se les debe dar cariño y apoyo para salir adelante.



¿Cuándo una persona es víctima de maltrato?



Sí es perseguida por la persona que usted ama

Hay problemas de infidelidad y amenazas

Se le ha negado compartir con su familia y sus amistades

No desea que usted se supere (estudie, trabaje)

Su pareja se altera luego de consumir licor o drogas

Le controlan el dinero en forma detallada

Es humillada delante de otras personas

Es agredida físicamente ( la golpea) a usted o a los niños

Ha sido amenazada con arma

Recibe amenazas de hacerle daño a los niños

La obliga a tener relaciones con él sin su consentimiento

¿Cómo buscar ayuda?

No ignore el problema

Hable con alguien.

Diríjase a un amigo o a un vecino.

Llame a la línea de ayuda a la mujer agredida y diríjase a un consejero.

Si a usted la lastiman llame la policía.

Tenga a mano los números de los albergues y agencias que ayudan a las víctimas de la violencia doméstica.

¿Qué hacer si usted es el agresor?

Busque ayuda para que no destruya a su familia

Intente ser consciente que existe legislación que se debe respetar y no violar los derechos de las demás personas

Sea responsable de sus acciones

Si la tensión es mucha y no puede ser controlada, váyase a caminar o a trabajar hasta tranquilizarse

Solicite los servicios de consejería o incorpórese a grupos de la comunidad que le ayudarán a cambiar.

Recomendaciones:

No proteja a la persona que la maltrata

Haga un plan que usted ejecutará si es agredida nuevamente.

Tenga dispuesto el lugar a donde irá en caso de agresión.

Tenga dinero guardado.

Tenga listos los documentos personales

Trate de hacer planes para el futuro y establezca metas personales.

Si cree que está en peligro váyase de la casa o procure que alguien de confianza venga y se quede con usted.

Piense en sus hijos y la enseñanza del comportamiento destructivo que les está transmitiendo en su hogar.

jueves, 4 de marzo de 2010

DERECHOS DE LOS MIEMBROS DE LA FAMILIA DESPUES DE UN DIVORCIO

En el siguiente enlace pueden ver EL CODIGO DE FAMILIA DE COSTA RICA y ahí pueden consultar cualquier duda con respecto a los derecho de cada uno de los miembros de la familia.

http://74.125.93.132/search?q=cache:u_vPnC9fqdIJ:www.muniliberia.go.cr/muni/Leyes/C%C3%B3digo%2520de%2520Familia.doc+codigo+de+familia+costa+rica&cd=1&hl=es&ct=clnk&gl=cr

TEMA DE ESTA SEMANA: EL DIVORCIO.

El divorcio es mucho más que la que la disolución de un vínculo legal.
Analiza los siguientes artículos.

EL DIVORCIO Y COMO AFECTA A LOS MIEMBROS DE UNA FAMILIA.

Y todo empezó con ternura, besos, pasión, mala suerte y muchas cosas más...........

Sobre el divorcio se habla y se ha escrito mucho desde el punto de vista legal, ya que es una preocupación inmediata el tratar de establecer los acuerdos básicos de la disolución de la pareja y la familia. Actualmente es fácil disolver una sociedad conyugal y constituir una nueva y repetir este proceso una o más veces. Son muy conocidos los casos de personas del medio artístico.
Pero ¿y qué pasa con el sistema emocional de las personas?

En este artículo hablaremos de las condiciones psico-emocionales que de desencadenan a partir del divorcio.

Lo primero que podemos decir es que lo "moderno" es aceptar el divorcio sin asustarse, desechando temores a los males que acarrea, ya que éstos desaparecerán tan pronto logremos adaptarnos a esta nueva concepción de la vida conyugal.
que el divorcio, repercute en la salud emocional de las personas involucradas, sobre todo las más cercanas a la pareja que se disuelve.
Las personas que se divorcian no siempre tienen toda la claridad de las repercusiones del mismo, ya que muchas de las repercusiones se darán al paso del tiempo.

Es importante mencionar que existe lo que llamamos “repercusión identificables” a través de la descripción que cada persona tiene de lo que ha vivido al lado de la persona de la cual ha decidido separarse o no pudo negociar quedarse a su lado, ya que existen personas que se quieren separar y otras que no lo quieren pero lo tiene que aceptar.

Y la “repercusión no identificables”, son las que cada persona experimentará en la etapa posterior al divorcio y podrá ir ajustándolas para vivir mejor si va descubriendo sus fortalezas en la terapia, si es que la toma, muchas veces las personas solo viven los síntomas de la separación como son la depresión, desesperación, confusión de su nueva vida, rencor, culpa y otros muchos sentimientos que pueden aparecer.

Ahora podemos dividir a lo que hasta antes del divorcio era una familia y sus integrantes, veamos que pasa con:

LOS CÓNYUGES.
Los conflictos emocionales producen síntomas muy variados, que incluyen síntomas físicos.

No es el tema de porque se producen, solo baste saber que si aparecen; quiénes no lo crean, solo pregúntenselo a quienes han pasado esta situación.

Recordemos que los seres humanos somos seres con una integración biológica, psicológica, emocional y social. Y en un momento crítico de la vida, los malestares pueden surgir en cualquiera de estas esferas o en todas, lo cual depende de cada persona y sus fortalezas y nivel de desgaste que se halla sufrido durante la “lucha” que se desarrolla para llegar al divorcio; cabe mencionar que esta lucha en muchos de los casos continúa después del divorcio.

EXTERNO Y LO INTERNO EN EL DIVORCIO

Existe lo que llamamos la etapa de crisis, con un sin número de factores emocionales, tanto positivos como negativos. Tal vez lo menos importantes se encuentran fuera de la persona y por eso se denominas externos.

Son los que se traducen en cambios y adaptaciones en el estilo de vida, en el trato y entorno familiar y de amigos, y en muchas ocasiones son de también los de carácter económico (este último actualmente tiene una gran relevancia) etc.,

Está lo que denominamos " factores internos", se encuentran a nivel emocional y son los mas afectados en esta etapa y generalmente se encuentran:

Sensación de fracaso, por no haber sabido o podido lograr un éxito en el matrimonio.

Celos derivados de lo anterior

Inseguridad y desorientación respecto al futuro.

Rencor, sensación de abandono, de traición, de soledad, lo cual puede llegar a límites increíbles.

Culpa que se traduce en auto acusación que se tiene o se cree tener del fracaso.

Acusación al otro cónyuge por la culpa que tiene, o cree que tiene

Remordimiento de conciencia, cuando hay implicadas otras personas "tercera persona"

Muchas veces se dan estos factores incluso sin que se haya roto el vínculo del amor, por ambos o por uno de los miembros de la pareja. Esto produce mucho dolor por la ambivalencia entre lo racional y lo emocional.

En ocasiones recurrimos a visita médica por los síntomas físicos cuando detrás esta el shock emocional, lo cual se detecta si se hace una exploración psico-emocional adecuada de la persona.

Es muy importante señalar que eliminar los síntomas físicos no elimina el conflicto que lo origina.

LOS HIJOS.
El descontrol emocional en los hijos es incomparablemente mayor; y muy especialmente, si el divorcio se produce durante la niñez o la pubertad, aunque es también muy grande en la adolescencia, y hasta en la edad adulta.

El puro temor a que se divorcien sus padres, afecta la salud emocional del niño, ya que para los hijos, sus padres son poco menos que todo en su vida. Los hijos ven de manera general en los padres a seres prácticamente sin defectos sobre todo en los primeros años de vida; salvo los casos de que los hijos sean maltratados severamente por alguno de los padres o que presencien agresiones por parte de alguno de los padres hacia el resto de la familia y en esos casos los hijos también sienten la necesidad de que se aleje el agresor y por lo tanto el divorcio se vuelve para ellos una buena alternativa. Esta opinión va cambiando a medida de que se crece, sobre todo los adolescentes son más agresivo o frontales en sus reapuestas, pudiendo asumir conductas de:

Rechazo
Solidaridad con quien ha sido agredido (generalmente en México la agresión es del padre hacia la madre) .

· Depresión

· Desinterés

· Agresión con su medio ambiente

· Uso y abuso de alcohol u otras drogas

· Aislamiento

· Ausencia recurrente de su casa

· Baja de calificaciones

· Conflictos repetidos con sus amigos o compañeros

· Uso de mensajes y actitudes de desprecio hacia los padres

· Etc.

En el caso de los hijos que ven con agrado a ambos padres, el mundo se desintegra con la amenaza de la separación, y va a costar mucho trabajo reubicar las piezas que queden a salvo posteriormente a la separación de sus padres.

FACTORES EXTERNOS EN LOS HIJOS

Estos adquieren una magnitud extraordinaria en los hijos. Ante todo, el niño (a) no puede vivir ya con ambos padres, como él lo desea, le tocará en suerte vivir con solo uno de ellos, generalmente la madre y alternativamente, por temporadas, con su padre.

Si vive establemente con uno, tiene que resignarse a disfrutar de la compañía del otro, sólo a ratos. Si vive alternativamente con uno y otro, tiene que adaptarse, también alternativamente, a dos ambientes que suelen ser distintos, e incluso antagónicos. Y en ambos casos, está expuesto a ser utilizado por sus padres como "arma" directa o indirectamente, premeditadamente o no, para molestar al o a la ex, o como "espía" para averiguar las andanzas del otro, o como objeto de "soborno", a base de darle gusto en todo, en una pugna insensata de a quien prefiere o quiere más.

Si a esto añadimos un nuevo matrimonio civil de uno de los cónyuges, el problema se le complica todavía más. Hay un nuevo personaje en su vida: el "progenitor postizo". Y éste puede ya tener hijos o tener nuevos hermanos.

La multiplicidad de recíprocas relaciones humanas, entre personas parcialmente extrañas, que tienen que convivir en intimidad de familia es tal, que resulta difícil de manipular para los propios adultos, aún más para los hijos.

Adicionalmente, se pueden presentar problemas con los otros niños ya que en la etapa de la escuela primaria los juegos entre niños, muchas veces llegan a verdaderos actos de crueldad.

FACTORES "INTERNOS"

En los hijos los factores "internos" son todavía más severos. El divorcio de los padres provoca un terremoto en la vida emocional de los hijos. Y este desajuste afecta de manera muy directa la seguridad en sí mismo.

Es como si al fallar sus padres, no pudieran confiar en nadie más. Solo percibe el mundo de diferencia que existen con quien había estado viviendo.

Estos descubrimientos van a provocar sentimientos "ambivalentes"" respecto a sus padres.

Siente hacia ellos atracción y repulsión, simultáneamente. Quisiera sentir, hacia ambos, solamente cariño y ya no puede. o se produce la ambivalencia respecto a un "progenitor postizo", hacia el cual siente atracción, porque "le cae bien", y repulsión por haber desplazado al progenitor verdadero.
Son un mundo de sentimientos desagradables, variados, complejos, antagónicos, que llegan a producir caos emocional.

LA REACCIÓN

Frente al desorden emocional, las reacciones son de lo más variado, y estas dependen de las circunstancias particulares de cada caso.
Rehuir el problema se traduce en una actitud de "no darse cuenta de lo que está pasando" o de "no me importa".

En una palabra, de ocultarlo disimular al máximo la tragedia interna en que vive. Y esta actitud del niño, convertido a veces en consumado actor, da a los mayores que le rodean la impresión errónea de que al niño "apenas le ha afectado" lo que ha sucedido.

Para poder rehuir el problema requiere de "represión" mediante el cual (automática e inconscientemente) logra ir eliminando del plano consciente de su vida psíquica, esos conflictos emocionales que le resultan insoportables.
Lo único que ha hecho es desplazar sus conflictos (sin saberlo él) del plano consciente al inconsciente; y allá, en el inconsciente, esos sentimientos conflictivos siguen generando "tensión" emocional.

En la mayoría de los casos podemos decir que los hijos son las víctimas INOCENTES del divorcio o de la mala relación de sus padres.

En el mundo de los adultos no cabe la menor duda de que el divorcio es una decisión que deben tomar los padres, y para mi opinión es importante conocer que piensan y sienten los hijos ante estas situaciones, lo cual ayudará a la construcción de lo que denomino “EQUIPO DE PADRES” que es el objetivo de la terapia familiar post divorcio que manejo.

LA SOLUCIÓN

La solución ideal no existe, se debe construir una solución en cada caso con apoyo de consejero o terapeuta familiar, a fin de establecer los acuerdos básicos para mantener el mejor equilibrio emocional de los ex cónyuges, de los hijos e incluso de las nuevas parejas que se puedan establecer.

Uno de los acuerdo básicos que recomiendo es el establecimiento del “Equipo de Padre”, que va a evitar una serie de conflictos posteriores al divorcio, para lo cual se requiere de la voluntad y valor de enfrentarlo.

Considero que con este panorama quedan muchísimas cosas más que tratar alrededor de la dinámica emocional que se establece, así que se podrá convertir en nuevos artículos que juntos den un panorama más completo de uno de los problemas que se ven mas repetidamente en nuestra actual sociedad.


DIVORCIO: CAUSAS Y COMPLICACIONES

El divorcio, sus causas y complicaciones


Por lo general, las causas de un divorcio son menos numerosas y más sencillas que sus consecuencias.

El divorcio es la segunda causa más dolorosa después de la muerte. Todos sabemos que somos mortales y que algún día, lo deseemos o no, vamos a tener que partir de este mundo. En cambio el divorcio es una decisión voluntaria. Nadie está obligado a divorciarse, pues la mayoría de los matrimonios se forman con las intenciones que duren una vida entera. ¿Cómo nace entonces esa determinación de romper un hogar? Veremos algunas causas:

1- Si la pareja, o uno de sus miembros no tiene claro lo que significa formar una familia que cumpla con los votos hechos delante de Dios de permanecer fielmente en el hogar, el resultado será una familia tambaleante que difícilmente será estable. Si el comienzo de aquel matrimonio fue poco promisorio, el futuro del mismo no puede ser mejor.

2- Cuando alguien viene de un hogar derrumbado va a tener la tendencia a continuar con el modelo de vida que causó el daño en el hogar de sus padres. Eso es lo único que esa persona conoce, lo cual llega a parecerle normal, y si ese estilo de vida no se corrige a tiempo, seguirá destrozando nuevas vidas en el futuro. Eso es lo que el Señor identificó como la dureza del corazón.

3- Cuando la pareja se casa por un motivo equivocado. Por ejemplo, porque viene un hijo en camino, por interés a una herencia sustancial, por no quedarse solo (a), por atracción física, etc.

4- Por una conducta infiel

5- Por alguna adicción incontrolable

6- Por mantener discordias permanentes

7- Derroche del dinero, por mal manejo del mismo y por negocios mal hechos

8- Excesiva intervención o control por parte de los suegros

https://www.lavoz.org/v4/content/view/116/65/

EL DIVORCIO: IMPACTO SOBRE EL HOMBRE

DIVORCIO:
El impacto sobre el hombre
La separación ahora es definitiva. La mujer que había sido su esposa por años lo dejó solo en la casa, que no reclamó, y con un montón de deudas. Quedarse en lo que una vez fue hogar es mucho peor que irse a vivir a una nueva casa. Quedaron muchas memorias sobre las paredes y en los rincones de la vivienda que compartió por mucho tiempo con la mujer que una vez fue la motivación de su vida. La madre de sus hijos se ha mudado; los niños se fueron con ella. El recuerdo de las palabras del niño le hacen sudar frío las manos y le engarrota las entrañas: Papi, ¿por qué tú no te estás mudando con nosotros?

El hombre está ahora solo en una casa vacía, sin muebles casi, sin cortinas. Un viejo televisor descansa sobre una mesita de noche a la que le falta una pata. No hay ruidos, sólo los que él hace, no hay quejas, sólo las que él se hace a sí mismo, no hay risas. No hay niños que se le suban a las piernas. Hay una rara ausencia de seres queridos. Hay un gran vacío. Solamente la pequeña caja japonesa con una pantalla de luz y colores gastados alivian la ausencia humana. ¡Gracias por la televisión!

Él hizo lo que pudo para detener una separación que era inevitable. Inclusive pasó por el proceso de desvestir su mente y hábitos íntimos delante de un consejero matrimonial y practicó consejos que no dieron resultado. Todo había fracasado. Se sentía fracasado. No quedaba nada ni qué hacer ni qué decir. Largas horas de conversaciones. Intentos vanos de comunicarse funcionaron al revés. Siempre recibía un «no» como respuesta, ya figurado, ya abierto. A veces, los recibía penetrantes envueltos en aquella frase frustrante de «Te conozco, sé que no vas a cambiar.» Frase que hería más cuando sí se estaba produciendo un cambio. Lo afirmaba paradójicamente la última frase que ella le dijo: «Ya no te conozco.»

Hay muchas fuerzas que unen a dos seres, aunque ya los sentimientos hayan sido destrozados por constantes malentendidos que no aceptan explicaciones. Qué difícil convencerla, si ella no quiere convencerse. También es difícil no herirla, a ella a quien no quiere herir. ¿Cómo terminar una relación amorosa en términos amistosos? ¿Cómo explicarle a un niño las crueles realidades de una separación total de sus padres? No hay fórmulas prácticas ni aceptables. Cómo quisiera él que las hubiera.

La separación es ahora irreversible. La decisión fue de ella, no de él. Ahora, las circunstancias lo obligan a aceptar la voluntad de ella. Con esa aceptación se ve empujado hacia una realidad nueva: una realidad que él también consideraría como su propio fracaso, porque no logró encontrar una manera de hacerle cambiar su opinión. No pudo motivarla a luchar por algo que él creía valioso. Aceptar tranquilamente la decisión de ella le era a la vez muy doloroso y muy confuso. No importa de qué forma él ahora enfrente la realidad, en todos casos, él lleva la de perder. Si se culpa a sí mismo por el divorcio, se sentirá mal, desajustado. Si quisiera construir un nuevo hogar ¿podría sostener una relación significativa y estable con otra mujer? Probablemente sí. Pero ahora todo es duda.

Si le echa la culpa a ella, entonces sentiría la impotencia de no haber podido encontrar otra solución inteligente que la de aceptarle su decisión irrevocable, una decisión hecha por otra persona y que él no podía cambiar. Si culpaba al destino era peor aún porque se sentiría como un títere en manos de lo Desconocido.

Al final, su orgullo, su identidad social quedarían profunda y terriblemente heridos. Todo sus principios se resquebrajarán. Recuerda: el frío y sofocación del primer beso. La proposición. La boda, el de novia, el bautizo del primer hijo. Recuerda todo aquella que parecía significar tanto en el pasado, no sólo para él, sino para ella, todo aquello ¿ya no contaba más? ¿Lo había olvidado ella todo? ¿Cómo era posible que ella fuera a olvidarse de tantos momentos agradables para fijarse solamente en los malos? ¿No fueron aquellos encuentros felices diez veces mejores que todas las desilusiones y todas las esperanzas infundadas?

Todos los símbolos de aceptación social: matrimonio, hogar, vástagos, estabilidad, seguridad, confort, señora, etc., todos esos tantos símbolos se habían perdido en una colisión violenta contra el divorcio, un hecho cotidiano desmembrante, antisocial, destructivo, como la muerte, algo de lo que se hacen bromas desde lejos, pero que cuando nos golpea desde nuestra esquina es aterrorizador.

Él ya no es un hombre casado. La sociedad tiende a echarle la culpa a los hombres cuando ocurre un divorcio. Raras veces es culpa de ella. Si algo va mal es porque él hizo algo malo: no era un buen esposo, era un mujeriego, tenía otra mujer, no le importaban los sentimientos de ella, ya no la quería. Y aun en el caso que fuera ella la que hubiera dejado de quererlo, también la culpa era de él por no saber mantener la llama del cariño.

Ahora él era un divorciado. Se había convertido en un individuo con un status social vago y transitorio que tendría que cambiar en un período muy breve. Los hombres no deben permanecer divorciados por mucho tiempo. Eso es muy mal visto. Un año, si acaso. Hasta que no encuentre otra mujer, él no será sino un paria temporal.

Las razones por las que un matrimonio fracasa son muchas, demasiadas para hacer una lista. Pero no puede faltar el «quién tuvo la culpa.» Sin embargo, echarse la culpa mutuamente o a las circunstancias no cambia la cuestión. El hecho queda de que cuando un divorcio se hace definitivo ambos tienen que adaptarse a la nueva situación. El matrimonio se acabó. La nueva realidad es el es el divorcio, una separación total, legal, moral y aceptada, aunque no del todo, como la última solución. Ya hasta el toque físico entre ambos se hace irritante o molesto.

El divorcio no es fácil para la mujer. Pero tampoco es fácil para el hombre. Sin embargo, casi todo el mundo cree que el período transitorio después del divorcia es más fácil para el hombre. ¿Es cierto eso? Puede que en algunos casos aislados. Pero en la mayoría, esos días son un período muy difícil de adaptación donde ni siquiera existe la ayuda real de amigos y familiares, los que por lo general abandonan al hombre y justifican la acción de la mujer. Por otra parte, hay libros que ayudan a la mujer a enfrentarse a un divorcio, pero hay muy pocos que ayuden y orienten al hombre.

Los hombres somos terriblemente vulnerables ante los sentimientos. Si tenemos que enfrentarnos a demasiadas emociones negativas de momento, una melancolía irritable, una soledad y una tristeza profunda nos invaden. Cada acción vital se convierte en algo insoportable. Para un hombre, los días que siguen a un divorcio son un período de pruebas extremas para su personalidad, su estabilidad mental y su conducta futura. Se ha de moldear con fuego o ha de perecer en las llamas.

La gente tiende a creer --curiosamente algunos maridos también-- que los hombres cuando se liberan y que, aquellos casos especiales cuando se quedan con el hogar, por la casa o el apartamento desfilan las mujeres por decenas día y noche. Creen que un divorciado no sabe lo que es la soledad. Qué equivocados. Aún si decenas de mujeres desfilaran todas las noches por su casa, él todavía se sentiría solo, porque ésos son los días de mayor soledad de su vida.

Si las causas del divorcio han sido turbulentas, si los pleitos han sido constantes, si estas discrepancias lo han estado irritando por mucho tiempo, su mente se sobrecarga con emociones negativas. Entonces, el divorcio actúa como una aspiradora que absorbe toda aquella mezcla emotiva atrapada dentro y deja en su lugar una terrible sensación de vacío. Este vacío debiera sentirse como un alivio, pero no es así. Ese vacío lo hace sentir inútil, sin metas, sin motivación alguna. Por supuesto, esa sensación depresiva es una ilusión de la peor clase y debe contemplarse como un periodo transitorio. Pero en ese momento ¿quién está como para tomar actitudes filosóficas?



Luego, el vacío se llenará normalmente con emociones mejores y más saludables, si es que el hombre valora la vida y su propio instinto de conservación o, aún mejor llenará el vacío con nuevos conocimientos y con un alcance más lejano para luchar, optimista, con la nueva situación y sacarle todo el provecho posible. Y pobre del que no lo hace...

Por otra parte, él podría ir hacia atrás, desesperadamente buscando por algo a qué aferrarse, algo con qué llenar ese vacío y lo que encuentre podría ser mucho peor. Podría no salir de bares, en procura de encuentros pasajeros o buscando a la chica de sus sueños en el lugar menos propicio y terminar alcohólico. O podría caer en un estancamiento mortal y agarrarse al pasado con poco o ningún poder de recuperación. Podría vivir como un vegetal. O luchar e ir hacia delante para probarse a sí mismo que puede ganar esta batalla que puede hacer de la derrota una victoria y abofetear al mundo que tan poco se ocupó de él. O hacerlo todo por la vida misma o por sus hijos, sus hijos que harán comparaciones en el futuro, quizás hasta con un padrastro. Él piensa: No. Mis hijos no verán en un padrastro a un hombre mejor que yo.

El tiempo cura las heridas...aunque deja cicatrices. La casa habrá de cambiar. Él, poco a poco, llenará el vacío. Hoy un cuadro nuevo para colgar en la pared. Mañana pintará toda la casa. Traerá nuevos muebles a su gusto, a su único gusto para sustituir los que la esposa escogió al suyo. Su vivienda será su cueva una cueva que mostrará su personalidad compartida o reprimida hasta entonces. Ahora, solo, tiene la oportunidad de probar si de verdad sirve.

Como un león en la selva, ofrecerá la paz de su hábitat a los amigos y al romance. Quizá pronto encuentre otra esposa que le quite los cuadros de la pared y ponga los suyos. Esto, ojalá no le suceda demasiado pronto. Un divorciado debe regalarse con el placer exquisito de poder estampar su personalidad por toda la casa, por lo menos, durante un año y disfrutar del hedonismo temporal y la compañía placentera de una mujer no posesiva que pueda reemplazar a gusto.

Pero lo que cuenta más para un divorciado es la certeza de que un día en el futuro, sus hijos, ya grandes se paren en cualquier lugar y digan a voz en cuello y a pesar de todo reto: «Mi padre es el mejor de los padres.»

Leonerk

http://www.angelfire.com/nt2/leonerk_mx/reflexiones/divorcio.html